domingo, 6 de marzo de 2016

Crónica macabra 3. Manuel Blanco Romasanta, el último lobisome




            Según su partida de nacimiento, nació el 18 de noviembre de 1809 en la localidad de Regueiro, en la aldea de Santa Olaia de Esgos. Por cierto, aparece como "Manuela", aunque ocho años después, en un registro parroquial,  ya aparece como “Manuel Blanco Romasanta”. ¿Un error de transcripción en su partida de nacimiento? Para Fernando Serulla, responsable de la Unidad de Antropología Forense del Instituto de Medicina Legal de Galicia, eso es una pista que indica que Romasanta sufría de pseudohermafroditismo. Esto habría provocado que, naciendo mujer, segregase una cantidad tan grande de hormonas masculinas que sufriera un periodo de masculinización en el que desarrollase características de hombre (vello facial y corporal) y que, debido a esa condición, su clítoris habría crecido tanto que parecería un micro-pene… Apuntala esta teoría el que el pseudohermafroditismo femenino genera episodios de fuerte agresividad, que explicarían su conducta criminal.
            Sea como fuere era un hombre bajito incluso la para época (1´37, según los registros) de facciones suaves, que tenía fama de amanerado por dedicarse a ejercer de sastre: coser, bordar, arreglar trajes y vestidos se consideraba una actividad femenina. No obstante siempre le gustaron las mujeres. Con 21 años (1831) se casó con Francisca Gómez Vázquez, vecina suya, que murió tres años más tarde sin haberle dado descendencia... Fuera por la razón que fuera. Viudo con 24 años, decide cambiar de vida, y por lo tanto de oficio: se hace buhonero, o vendedor de quincalla, que para el caso son el mismo oficio. Un oficio sospechoso para las autoridades de aquella época, por lo que conlleva de ambulante... y en este caso no es por falta de motivos. Romasanta recorre así toda Galicia, con viajes esporádicos a Portugal y a Castilla. Pronto empiezan a correr rumores: Dicen que vende ungüentos hechos con grasa de muerto. Que en Castilla mató a un criado del prior de San Pedro de Rocas. Que mató también al vendedor Manuel Ferreiro en 1834, y diez años más tarde le acusan de la muerte de Vicente Fernández, alguacil de León, que le seguía la pista. Por todas esos rumores y sospechas se resolvió que se presentase a declarar, para investigar tantos y tan graves cargos. Romasanta no se presentó ante el juez, y las fuerzas del orden fueron incapaces de encontrarle. Ante ello, fue declarado en rebeldía y condenado a diez años de cárcel el 10 de octubre de 1844 (aunque, teniendo en cuenta cómo las gastaba la justicia de la época, yo también hubiera puesto tierra de por medio. Recuerden la película de "El crimen de Cuenca", de Pilar Miró)
            ¿Y dónde estaba escondido Romasanta? En una aldea llamada Rebordechao, en Allariz (Orense), donde alterna el trabajo de jornalero con la venta ambulante o incluso el contrabando con Portugal a pequeña escala. Se le conoce como "el Canicha", por su pequeña estatura,  o "el Tendero", por su costumbre de "montar tienda" con la mercancía que trae. Es de carácter afable según sus vecinos y buen trabajador según sus amos.
            En 1846 realiza el primero de los nueve asesinatos que se le atribuyen (aunque él confesó haber cometido trece). Se ofrece a acompañar a Manuela García y a su hija Petra hasta Santander, en busca de un mejor trabajo allí. ¿Y quién mejor que el bueno de "El Tendero" que tan bien se conoce los caminos, para el viaje? Según confesó posteriormente hizo con ellas lo que haría luego con sus otras víctimas: una vez solos en el bosque las asesinó, las desnudó y devoró... pues por culpa del maleficio de una bruja se convertía en mitad lobo y mitad hombre. Otra versión, más creíble, es que descuartizaba los cuerpos para que así los devoraran con más facilidad los lobos. Sus ropas y demás posesiones, las vendía por los pueblos. Esa suerte corrieron  Benita García y su hijo Francisco, de 9 años, en 1847; Antonia Rúa y sus hijas María Dolores, de 11 años y Peregrina, de 3 años, en 1849; Josefa García y su hijo José, de 21, en 1850.
            Demasiadas muertes ya, y familiares y vecinos empiezan a sospechar del bueno de Romasanta, que se lleva a la gente a la ciudad para una vida mejor y que luego de nadie se sabe... Huyó de Galicia pero la policía estaba sobre aviso, y esta vez no pudo escapar: fue arrestado con el nombre falso de “Antonio Gómez” en Nombela (Toledo) en 1852.

    La primera vez que me transformé fue en la montaña de Couso. Me encontré con dos lobos grandes con aspecto feroz. De pronto, me caí al suelo, comencé a sentir convulsiones, me revolqué tres veces sin control y a los pocos segundos yo mismo era un lobo. Estuve cinco días merodeando con los otros dos, hasta que volví a recuperar mi cuerpo. El que usted ve ahora, señor juez. Los otros dos lobos venían conmigo, que yo creía que también eran lobos, se cambiaron a forma humana. Eran dos valencianos. Uno se llamaba Antonio y el otro don Genaro. Y también sufrían una maldición como la mía. Durante mucho tiempo salí como lobo con Antonio y don Genaro. Atacamos y nos comimos a varias personas porque teníamos hambre.
    Manuel Blanco Romasanta,
CAUSA Nº 1778: CAUSA CONTRA HOMBRE LOBO, JUZGADOS DE ALLARIZ (ORENSE)

            El abogado defensor lo presentó como un enfermo mental. El juez, en cambio, concluyó que no era ni loco ni maniático ni idiota, y el 6 de abril de 1853 lo condenó a muerte por garrote vil. Posteriormente, y gracias a un indulto de la mismísima Isabel II, se le conmutó la pena a cadena perpetua., a cambio que un hipnólogo francés (un tal "doctor Mr. Philips") pueda estudiar su caso e interrogarle mediante hipnosis.  Se desconocen los resultados de tal experimento.
            Murió en prisión, pero no está muy claro en cuál, ni cuándo. Unos dicen que en la prisión de Allariz, en Orense. Otros, en el castillo de San Antón (en La Coruña). recientemente, han aparecido pruebas que lo sitúan en el presidio de Ceuta. Sobre la fecha más probable de su muerte, ronda entre 1854 y 1863

            ¿Qué era Manuel Blanco Romasanta? ¿Un pseudohermafrodita con ataques de agresividad, como se ha apuntado al inicio de este artículo? ¿Un asesino a sangre fría? ¿Se hizo pasar por loco para evitar la pena capital, y quizá la cárcel? ¿Se creía realmente un lobo, por padecer esquizofrenia agresiva o trastorno antisocial de personalidad, como apuntan los psiquiatras actuales?

"Manuel Blanco calcula medios, mide y combina tiempos, modos y circunstancias; no mata sin motivo, ni acomete sin oportunidad; conociendo que hace mal se oculta, seduce para robar; mata para ocultar, reza para seducir; conoce el deber y la virtud para desoírlos; luego de su conformación de sus actos, de su historia, de sus disculpas mismas se evidencia que el Manuel Blanco no es loco, ni imbécil, ni monomaniaco, ni lo fue, ni lo logrará ser mientras esté preso, y por el contrario de los datos referidos resulta que es un perverso, consumado criminal, capaz de todo, frío y sereno, sin bondad y con albedrío, libertad y conocimiento; el objeto moral que se propone es el interés; su confesión explícita fue efecto de la sorpresa, creyéndolo todo descubierto; su exculpación es un subterfugio gastado e impertinente; los actos de piedad una añagaza sacrílega; su hado impulsivo una blasfemia; su metamorfosis un sarcasmo."
INFORME MÉDICO SOBRE EL LLAMADO MANUEL BLANCO ROMASANTA , JUZGADOS DE ALLARIZ (ORENSE) - CAUSA YA CITADA-

Próxima entrega: Juan Díaz de Garayo, el sacamantecas

1 comentario:

  1. Muy bueno este post. Mucho queda por saber del Romasanta...y mucho podemos inventar para nuestros (macabros y rolísticos) planes. Merecedor, sin duda de un partidilla de Piel de Toro. ¿Y si Romasanta no fuera más que un servidor de un auténtico brujo o nigromante que le conseguía lo que necesitaba, tal vez con contactos con la vampira de Barcelona? ¿Y si le hubiese prometido algo que deseara de verdad...como ser hombre/mujer al completo?Mmmm paro, que voy a tener que coger los dados!
    Un saludo.

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